Los desafíos del entorno VUCA. Esa capacidad de responder al futuro inmediato.
Aquellas empresas que no sepan adaptarse con rapidez, agilidad y constancia a los cambios e imprevistos que van surgiendo, se verán abocadas al fracaso ante la fuerza y estabilidad que ya están consiguiendo sus principales competidores y el resto de compañías del sector.
El entorno VUCA, en el que se mueven las organizaciones en la actualidad, se caracteriza por la volatilidad, la incertidumbre, la complejidad y la ambigüedad. Este concepto se fraguó en la década de los noventa por los soldados norteamericanos y que responde al acrónimo inglés formado por los términos Volatility (V), Uncertatinty (U), Complexity (C) y Ambiguity (A). Este hecho exige a las empresas ser más ágiles y adaptarse a los cambios constantes. De hecho, la agilidad marca cada vez más la diferencia, y más en el actual entorno post Covid-19.
Para sobrevivir en un futuro VUCA hay que empezar a trabajar en el presente, y mejor hacerlo cuanto antes.
La figura del líder es vital en el entorno VUCA basado en las siguientes premisas:
- Abordar la volatilidad con una correcta visión de futuro (V).
- Afrontar la incertidumbre con conocimiento, formación, actualización constante, es definitiva con entendimiento (U).
- Aportar claridad, simplicidad y sencillez en la ejecución de tareas y acciones dentro del seno de la organización (C).
- Acabar con la ambigüedad con agilidad, con una rápida capacidad de reacción ante los imprevistos que sucedan y que atenten contra la planificación estratégica de la organización (A).